lunes, 18 de noviembre de 2024

Laurel Aitken, el padrino del ska


 Laurel Aitken nacido en Cuba en abril de 1927 y fallecido en Leicester, Inglaterra, el 17 de julio del 2005. Con 8 años se traslada con su familia a Kinsgton, Jamaica, y con 12 años empieza a cantar Calypso y tocar la guitarra para los turistas a cambio de propinas. Su nombre real era Lorenzo Aitken. Sus primeras grabaciones datan de 1952 y eran en clave lies y R&B. Se le conoció como "The Godfather of Ska". Este pionero del género graba ya en 1958 una de las primeras grabaciones del ska, “Little Sheila “ y “Boogie in my Bones”. En los años 60 se trasladaría a Londres, teniendo un gran éxito con su música y viviendo allí la mayor parte de su vida. Aitken tiene un extensa discografía: Ska with Laurel, Rise & Fall, The Pama Years, Rudi Got Married, Superstar,The Story So Far, The Blue Beat Yeras, The Legendary Godfather of Ska, Laurel Aitken & The Skatalites The Original Cool Jamaica Ska ,etc… Asimismo innumerables singles como: “Aitken´s Boogie”, “Jennie is Back”,”Judgment Day”, “Love Me Baby”,”Sweet Jamaica”, “Bad Minded Woman”,”Rock Steady”,”Reggae Player”,”Sexy Boogie” y montones de álbumes más.

También podéis conseguir videos de el como: En vivo en Gaz' Rockin' Blues (1989), Unicornio y Laurel Aitken y sus amigos - Vive en el Club Ska (2005).

Aitken ha cantado fundamentalmente en inglés pero también en castellano, ahí está su magnífico álbum En Español con los Skarlatines, e incluso como anécdota contaros que llegó a hacerlo en francés -Je Táimerai Tojours, Eh Mon Amour-, e italiano, -Preghero-.

Colaboró con muchas bandas en los años 60, y a finales de los 70, con el resurgimiento del ska con el movimiento two tone y con bandas posteriores como: The Busters, The Toasters, Potato 5, los ya citados Skarlatines, etc… Participaciones en discos junto a The Skatalites, Rico Rodríguez (que además de su fabulosa carrera, Rico también a su vez colaboró con The Specials), Floyd LLoyd , etc… También fue promotor y productor.

Oyendo temazos  como: “It´s Too Late”, “Boogie Rock”, Honey Girl”,”Witch Doctor From Amsterdam”, “Shame and Scandal” ,”Dracula Princes of Darkness”, “Skinhead Train”,” You Got Me Rockin´”Ojos Sexys”, etc… uno admira  a uno de los grandes genios de la música de todos los tiempos que es Laurel Aitken.

Sufrió una grave enfermedad  y tuvo un ataque al corazón un año antes de su muerte pero prácticamente, con gran profesionalidad, estuvo dando conciertos casi hasta el final. Falleció por otro ataque al corazón, como ya se ha dicho, el 17 de julio de 2005. Laurel Aitken fue uno de los cantantes que más ha actuado por todos los rincones del planeta y uno de los mayores genios que ha dado la música.

Alfonso Carlos López


viernes, 15 de noviembre de 2024

Mis tres relatos favoritos de... Edgar Allan Poe

 

Malina Murnau

"El entierro prematuro" ("The Premature Burial", 1844).

Mi favorito de Poe, sin duda. He de confesar que lo leí de muy niña y me dejo traumatizada, pero al mismo tiempo me encantó, me atrapó en su lectura incómoda y me revolví en el asiento duro de una silla de las de antes de colegio. "Sillas de tortura", en la biblioteca pobre y destartalada con cuatro libros, de un pueblo. Pero qué libros señores. Con 9 años descubrí a este gran escritor de la soledad, crueldad y tristeza. Y desde entonces uno de mis favoritos.

"La narración de Arthur Gordon Pym"  ("The Narrative of Arthur Gordon Pym of Nantucke", 1838).

La única novela de Poe, pero que es una puta pasada. Maravillosa. No da tregua, no para de dar malas noticias y de pasarlo fatal. Una obra dedicada al mar y su inmensa soledad. Descrita con todo detalle. Una gran obra, con final agridulce. Si no la han leído, que lo dudo mucho, no esperen más, a por ella...

"La verdad sobre el caso del señor Valdemar"/"El extraño caso del señor Valdemar" ("The Facts in the Case of M. Valdemar", 1845).

Y como última pondré otra joyita que tiene tela. Una narración cojonuda que da un mal rollo increíble. Un enfermo terminal, un doctor e hipnotismo, ahí lo dejo. Podredumbre en el ambiente. Una genialidad.

Y pondría muchas muchas más, pero dejo las tres que quizás me impactaron más. Y que quizás he leído más veces.

Alfonso Romero

"La narración de Arthur Gordon Pynn" ("The Narrarive of Arthur Gordon Pynn", 1838).

Poe en largo (aunque tampoco mucho). Una novela de aventuras llena de suspense y mal rollo. Con un final algo precipitado, pero que deja muy mal cuerpo al lector, y con ganas de que la cosa continuara un poco más.

"El corazón delator" ("Tell-Tale Heart", 1843).

Maravilloso relato sobre la culpa en un caso de asesinato que traza ciertos paralelismos con otros de su autor. De entre las diversas adaptaciones a la pantalla de "El corazón delator", me quedo con el corto animado de la UPA, dirigido por Ted Parmalee en 1953, con la voz de James Mason haciendo avanzar la trama. Una maravilla de sólo ocho minutos.

"La máscara de la muerte roja" ("The Masque of the Red Death", 1842).

La historia del príncipe Próspero y otros nobles, refugiados en una abadía, tratando de evitar una plaga de peste conocida como "la muerte roja". El final es de antología. El mal encarnado por Próspero será reflejado en otros reyes, nobles y poderosos, como los de "La maldición del hombre lobo" (1961), de Terence Fisher.

Miguel Romero

Su influyente trabajo ha sido trasladado al cómic (Richard Corben, entre muchos otros) y, por supuesto a la pantalla, grande y pequeña. Desde Roger Corman a Narciso Ibáñez Serrador, pasando por Piquer Simón, George A. Romero o Dario Argento, por citar algunos, se han basado en las obras de este maestro. Incluso el hoy afamado Mike Flanagan buscó inspiración en sus relatos tras el fiasco de su “Misa de medianoche” (2021). 

Una vez más resulta complicado destacar sólo tres…

“El sistema del Dr. Tarr y el profesor Fether” (“The Method of Dr. Tarr and Professor Fether”, 1845). 

Relato corto conocido también con otros títulos y llevada varias veces al cine, la última por Brad Anderson en 2014 con su film “Asylum. El experimento”, tras llegar al manicomio el protagonista acabará descubriendo que los doctores y encargados del centro son en realidad los locos que han ocupado sus puestos…

“Los crímenes de la calle Morgue” (The Murders in the Rue Morgue”, 1841).

El detective C. Auguste Dupin (protagonista también de otros relatos de Poe) será el encargado de descubrir al pérfido villano (que en el cine tendría el rostro de Bela Lugosi o Karl Marlden) que usa simios para sus pérfidos planes en las calles de París.

“El barril amontillado” (“The Cask of Amontillado”, 1846).

Tratando un tema tan querido por su autor como el de alguien enterrado vivo, en este caso situando la trama en Italia y encerrándolo en un barril. 

Alfonso Carlos López

Edgar Allan Poe es todo un referente para mi, siempre me han apasionado sus relatos. Tiene ese sabor increíble del terror bien hecho, con una gran clase y ambientados en una época fascinante. Ha sido fuente de inspiración para otros escritores, grupos de música, directores de cine, guionistas, etc… Realmente fundamental tanto en la historia de la literatura como en el terror.

"El hundimiento de la casa Usher"/"La caída de la casa Usher" ("The Fall of the House of Usher", 1839).

Este cuento de terror fue publicado por Burton's Gentleman's Magazine en 1839. El argumento es bien conocido y fue también llevado al cine. Tiene todos los ingredientes: un caballero es invitado a una mansión cuyo dueño está aquejado de una  rara enfermedad, la hermana, la cripta, etc...  Acaba con el hundimiento de la casa ,que por ello da título al relato. Estamos ante uno de los mejores relatos que se hayan hecho nunca de este estilo. Realmente fascinante. Posiblemente, dentro de la magnífica obra de Poe, sea el más brillante de todos, al menos a mi juicio.

"Los Crímenes de la calle Morgue"/"Los asesinatos de la calle Morgue" ("The Murders in the Rue Morgue", 1841).

Este cuento conjuga el terror con el género policiaco, creando algo muy inquietante y de gran calidad literaria. Fue publicado en la revista Graham's Magazine, de Filadelfia, en abril de 1841. Toda una novedad porque está considerada la primera historia sobre detectives. El genio de Poe, como digo, fue precursor de algo que daría lugar al género policiaco más adelante. El autor se inspiró  en un caso real y en el  inspector de policía de París, Vidocq, el protagonista sería  el detective Monsieur Auguste Dupin en la obra de Poe. Podemos decir sin lugar a dudas que fue un visionario y se adelantó a su tiempo.

"El barril de amontillado"/"El tonel de amontillado" ("The Cask of Amontillado", 1846).

Recuerdo como me impresionó y a la vez me encantó en la magnífica serie de “Historias Para No Dormir” del gran Chicho Ibáñez Serrado “El Tonel”, que era una adaptación de este cuento de Edgar Allan Poe. Es por ello que no podía faltar en esta terna, tanto por derecho propio de la magistral obra de Poe, como para rendir homenaje a Ibáñez Serrador y mis recuerdos sobre esta serie. Edgar Allan lo publicó en 1846 y constituye un texto lleno de suspense que se desarrolla en los carnavales de Italia en el siglo XIX, y  tiene en su argumento la venganza de Montresor contra Fortunato por una humillación sufrida. Aprovechando su estado de embriaguez, lo lleva a su palacio, engañándole para que probara un nuevo vino. En las catacumbas de dicha casa se producirá la venganza.

La obra de Poe es inmejorable y  es difícil escoger tres entre maravillas como: “El Rey Peste” (1835), “El diablo en el Campanario” (1839), "El pozo y el péndulo” (1842), “El entierro prematuro” (1844), “La esfinge” (1838), “La verdad sobre el señor Valdemar” (1845), etc…

Eduardo Álvarez Cónsul

"Conversaciones con una momia" ("Some Words with a Mummy", 1845).

Este relato fue de los primeros en que la descripcion de una momia resucitada.

"El pozo y el péndulo" ("The Pit and the Pendulum", 1842).

Este relato lo lei en el colegio y la descripcción que hace de la celda y de como se siente el protagonista.

"El cuervo" ("The Raven", 1845).

Para muchos es la obra maestra de Edgar Allan Poe. Siempre que se nombra la serie de televisión "La familia Munster" me acuerdo del homenaje del cuervo que hace de reloj de la familia.

Joanna

Una de las imprescindibles plumas del terror gótico. Un genio atormentado (¿cuál no?) cuya sombra, alargada, descansa sobre una infinita cantidad y variedad de escritores, dibujantes de cómics, guionistas, músicos, directores de cine y teatro, y un largo etcétera. Tengo debilidad por las versiones de sus textos que hizo para cine Roger Corman, y las dibujadas en historietas por Richard Corben, que nos llevan a un universo gotico de mucho, mucho color, donde la sangre luce bien roja.

"Los Crímenes de la calle Morgue"/"Los asesinatos de la calle Morgue" ("The Murders in the Rue Morgue", 1841).

Recuerdo el miedo que le daba a mi madre tan sólo el título de este relato del escritor nacido en Boston, pues le recordaba la adaptación de 1952 , que había visto en el cine, con Karl Malden de villano, aquel actor que tanto le gustaba de "Las calles de San Francisco" (1972-1977). Una intriga detectivesca que influiría en muchos autores después (miro a Edgar Wallace), y en muchos directores de cine también, adaptaran o no el texto de Poe. Personalmente me encanta, por bizarra, la película dirigida por Robert Florey en 1932 con Bela Lugosi como el malvado doctor Mirakle.

"El entierro prematuro" ("The Premature Burial", 1844).

Seguramente el relato de Poe que más mal me lo hizo pasar y que en mi infancia me hizo temer que me metieran aún con vida dentro de un féretro. No puedo, por supuesto, quitarme de la cabeza la adaptación de Roger Corman, "La obsesión" (1962), protagonizada por Ray Milland (y no por Vincent Price como el resto del ciclo)... Ni tampoco, versando sobre el mismo tema, el entierro en vida de "la novia" (Uma Thurman) en "Kill Bill Volumen 2" (2004). ¡Qué mal rollo!

"El cuervo" ("The Raven", 1845).

Mi más temprana aproximación al relato de "El cuervo" fue en una adaptación al cómic en las páginas de Creepy, antes de que cayera en mis manos las palabras escritas de Edgar Allan Poe. La adaptación de Corman en este caso, y pese a su atractivo elenco, me dejó con los ojos abiertos por su pasotismo respecto a la letra impresa. Con los años la disfrutaría más, aunque sigue sin ser de mis favoritas.

Jorge Arincón

Pues sin duda estamos ante el escritor más influyente de todos los de género fantástico. Su obra ha inspirado muchísimo a otros campos del arte como el cine, la música, el cómic... Guardo cómo oro en paño ese especial que le dedicó Creepy con autores como Corben, Luis Bermejo y donde destacaba ese inolvidable "El gato negro" dibujado por Bernie Wrightson.

Muy difícil escoger sólo tres relatos, en sus  "Narraciones extraordinarias" se encuentran auténticas joyas,"El entierro prematuro" (1844), "El pozo y el péndulo" (1842), "El corazón delator" (1843),...

Ahí van mis tres escogidos:

"El gato negro" ("The Black Cat", 1843).

Este relato es simplemente perfecto de principio a fin. Te atrapa desde el primer momento y te sorprende con ese inolvidable final. 

Edgar Allan Poe expulsa aquí sus demonios hablando del problema del alcoholismo del protagonista que él mismo sufrió.

De obligada lectura.

"El escarabajo de oro" ("The Gold Bug", 1843).

Hace poco lo volví a leer y me sigue sorprendiendo igual que la primera vez. 

Cómo va evolucionando la narración en la que aparentemente un tipo está perdiendo la razón con un comportamiento extraño, y ese final con la resolución del mensaje encriptado dándole sentido a todo...¡Que barbaridad!

"Los Crímenes de la calle Morgue"/"Los asesinatos de la calle Morgue" ("The Murders in the Rue Morgue", 1841).

Relato de crimen bestial y aparentemente irresoluble en el que el protagonista, Auguste Dupin, desenredara la madeja hasta descubrir al "sorprendente" autor.

Poe servirá aquí de precursor de la novela policíaca y trazará el camino a seguir a otros cómo Conan Doyle y su Sherlock Holmes.

El relato inspiró además a Iron Maiden que en su segundo álbum, "Killers", incluía la canción "Murders in the Rue Morgue".

Merryk Mayfair

Leí al señor Poe hace ya varios años, en una etapa de profunda tristeza y pensamientos extraños. Me encantó su forma de expresarse al hablar de temas “oscuros” con esa facilidad. También me avergüenza decir que solo leí dos obras del gran Poe, pero prometo poner remedio a eso lo antes posible. Estas obras fueron "El cuervo" (1845) y "Los crímenes de la calle Morgue" (1841). Este último me encantaría volver a leerlo en cuanto tenga la oportunidad, ya que hace mucho tiempo que lo leí.

Fernando Rodríguez Tapia

Llegué con retraso a la lectura de los relatos de Edgar Allan Poe y siempre he picoteado más su obra que someterme a una inmersión total en su obra a diferencia de otros escritores posteriores. 

Mi apreciación es que su calidad, imaginación, perspectiva y legado es superior al resto. 

Vida y obra, mito y leyenda, miedo y poesía, amor y muerte, en Poe cobra todo sentido, Por eso seguimos leyéndole con admiración y respecto. 

A continuación tres relatos que escojo para la ocasión como bien podría haber seleccionado otros diferentes:

"El corazón delator" ("Tell-Tale Heart", 1843).

Me fascina la descripción que el escritor norteamericano realiza de una mente criminal y desquiciada, así como la obsesión vital que le acaba torturando.  Es un relato directo, sorprendente que gana en cada lectura que se hace de él y que ha tenido excelentes adaptaciones en el terreno visual. 

"El hundimiento de la casa Usher"/"La caída de la casa Usher" ("The Fall of the House of Usher", 1839).

El cuento terrorífico canónico por excelencia y la quinta esencia de lo expresado por su autor a lo largo de su obra. El misterio, la seducción por lo desconocido, las atmósferas malditas, las visiones de ultratumba. Su influencia salta a otros medios como la música, el cine, el comic o el teatro siendo su obra más adaptada que a día de hoy nos sigue fascinando.

"El misterio de Marie Roget" ("The Mystery of Marie Rogêt", 1842-43): 

La segunda aparición de Auguste Dupin y uno de los relatos más curiosos en la trayectoria de Poe especialmente por el contexto que le rodea. Basado en un suceso real acaecido en Nueva York, el escritor elaboró este cuento como investigación personal del hecho sucedido un par de años antes siguiendo los hallazgos del crimen por la prensa de la época y estableciendo una teoría ajena a la versión oficial si bien muy rigurosa de capital influencia para los posteriores investigadores que ha ido generando la literatura. Obra de gran precisión siempre a la sombra de "Los crímenes de la calle Morgue" a la que probablemente supere en resultados finales.

P.D.: escribo estas líneas mientras suena de fondo el memorable disco de The Alan Parsons Project: "Tales of Mystery and Imagination" (1976).


Pepe Torres

Para quienes crecimos envueltos por las brumas de la poética de Edgar Allan (en feliz traducción de Julio Cortázar en mi caso), la literatura de Poe ha sido la piedra angular para nuestra formación personal y el paradigma sobre el que juzgar y justipreciar todas nuestras lecturas posteriores (de Lovecraft a Shirley Jackson, de Bécquer a Henry James, de Stoker a Bierce). Seleccionar solo tres cuentos (en realidad escojo 2 y un poema) de la amplia y trágica obra del escritor estadounidense se antoja casi una apuesta de nuestra cabeza con el diablo, pero me centraré en aquellos títulos que, con mayor denuedo, han dejado su impronta en mi vida, escritura e, incluso, construcción de imágenes.

“El sistema del Dr. Tarr y el profesor Fether” (“The Method of Dr. Tarr and Professor Fether”, 1845). 

Un concepto relativamente sencillo, una vuelta de tuerca a una situación que se desvela anormal y progresivamente amenazadora hasta el raudo estallido de violencia y horror, que el tiempo ha acabado convirtiendo en nuestra realidad distópica. “Todo sucedió por culpa de un imbécil... un loco que sostenía haber inventado el mejor sistema de gobierno jamás imaginado... gobierno de locos, se entiende. Supongo que quería experimentar su invención y persuadió al resto de los enfermos a que se le unieran en una conspiración destinada a derrocar los poderes reinantes.”

“El cuervo” ("The Raven", 1845).

Ell amor trágico, los recuerdos y la pérdida. Cada vez que un desengaño amoroso turbaba mi espíritu, esgrimía un rotulador y escribía con tinta sobre mi antebrazo las inmortales palabras entonadas una y otra vez por el cuervo de Poe: Nevermore (Nunca más). “Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama tiende en el suelo su sombra. Y mi alma, del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo, no podrá liberarse. ¡Nunca más! “

“Hop-Frog” ("Hop-Frog; or, the Eight Chained Ourangoutangs", 1849)

Quienes crecimos siendo el payaso de la clase y enmascarando así nuestra timidez (o cualquier otra tara de personalidad que nos impidiese ser “uno de ellos” y nos arrinconase a ser  “one of us”), la figura trágica del loco que finalmente da rienda suelta a sus impulsos primigenios encarnaba mucho de aquello que, secretamente, ansiabamos ejecutar. “En cuanto a mí, no soy nada más que Hop-Frog, el bufón... y ésta es mi última bufonada”.

Carlos Enríquez

Edgar Allan Poe fue un maestro del terror y lo macabro. Sus cuentos exploran los abismos de la mente humana y sus aspectos más oscuros, para mí siempre ha sido un referente. Suelo recomendar a los amigos que adquieran una edición estupenda del año 2009 publicada por Edhasa (traducción de Julio Cortázar). Yo mismo poseo dicho volumen y lo he regalado también en alguna ocasión en cumpleaños o fechas señaladas. Entre los temas recurrentes en su obra destacan la culpa y la locura, el amor obsesivo, la muerte y el más allá, las adicciones, el aislamiento, el miedo… Ha sido muy difícil decidirme por tres, y quizás he pecado de irme a los fáciles, a los más típicos, pero bueno, he basado mi elección en los primeros títulos con los que tuve contacto. Me dejo en el tintero una ristra de relatos buenísimos, pero bueno, ahí está la gracia de esto, ¿no? Así que… me dejo de rollos y vamos con LOS TRES: 

“El barril amontillado” (“The Cask of Amontillado”, 1846).

Para mí, el cuento más malvado entre los cuentos dedicados al mal. Lo conocí en versión cómic y mi joven corazón se quedó encogido una buena temporada. Es un retrato de la venganza pura y dura, sin concesiones, de cómo un ser humano puede llegar a castigar a un semejante de manera definitiva a causa de unas presuntas ofensas. Y no quiero decir nada más para no estropeárselo a nadie, aunque me imagino que por estos lares todo el mundo lo conoce. Creo que todos hemos pensado alguna vez en «castigar» a alguien, pero… ¿de esta manera? Se me hace difícil imaginarlo, ¡ja, ja, ja! 

Por cierto, el gran Chicho Ibáñez Serrador, en su adaptación "El Tonel", de 1961 (rodada para la serie «Historias para no dormir»), consigue darle una vuelta de tuerca al final y que el desenlace llegue a ser más escalofriante todavía. Si alguien no la ha visto y tiene curiosidad, se puede ver el capítulo desde aquí:

https://www.youtube.com/watch?v=MOaWYmmeZBw. 

Además, según me informaron nuestros compañeros en estas lides Alfonso y Miguel Romero, existe una versión anterior rodada en Argentina en 1951 por el padre del propio Chicho, el director Narciso Ibáñez Menta (mismo final). El que lo desee puede ver también esta adaptación desde aquí: 

https://www.youtube.com/watch?v=iIGc8BbPDls

"El corazón delator" ("Tell-Tale Heart", 1843).

Este cuento sigue la historia de un hombre que insiste en su cordura mientras describe cómo asesina a un anciano al que cuidaba. Lo hace con una frialdad que pone los pelos de punta. Esa supuesta «lucidez» de la que hace tanto alarde será también su perdición. Así que tenemos aquí otro de esos cuentos dedicados al lado oscuro del alma y cómo la mente de un ser humano puede ser su propio verdugo. Tampoco deseo extenderme más porque creo que lo mejor es leerlo, y en esto del buen relato corto el final debe ser siempre una sorpresa. 

"El gato negro" ("The Black Cat", 1843).

Otro de esos cuentos siniestros de «crimen y castigo», muy popular y con el añadido de la aparición de adorables mascotas. En esta historia, un hombre que se aficiona a la bebida a pesar de los efectos negativos que produce sobre su psique se deja arrastrar por su adicción hasta el punto de provocar una catástrofe «doméstica». Y claro… el castigo está en marcha. Como dice mi amiga y maestra la escritora Concepción Perea, el final te deja «con el culo torcío». Decir también que este cuento ha sido objeto de buenas adaptaciones cinematográficas y para televisión. Recuerdo una antología de tres cuentos protagonizados por Vincent Price (Morella, El gato negro y El extraño caso del señor Valdemar) titulada «Historias de terror» (Tales of Terror) y que dirige, ¡cómo no!, el gran Roger Corman en 1962.

David Cortabarria

Edgar Allan Poe (1809.01.19 – 1849.10.07). Escritor por el cual siento un gran aprecio por sus relatos cortos, algunos de los cuales son de ciencia-ficción, género en el cual no destacó como sus contemporáneos H.G. Wells, Julio Verne o Stanley Weinbaum (un gran desconocido, fallecido con tan solo 33 años, pero autor fascinante de 5 libros y unos 30 relatos), pero en el que desde luego dejó su huella. No escribió ci-fi “pura” como los mencionados autores, pero tuvo una influencia enorme en gigantes como Philip K. Dick.

El Poe con el que más me identifico es el del terror, el de los cuentos góticos, aquél cuya influencia puedo rastrear perfectamente en la obra de mi admirado Stephen King. 

Un desvencijado tomo de relatos de Poe y el disco “Tales of Mystery and Imagination” de The Alan Parsons Project (1976) fueron mi puerta de entrada al universo del malogrado escritor, que mereció vivir muchos más años y tener mucho más éxito en el transcurso de ese tiempo.

Selecciono tres de sus relatos que más me impactaron:

"La máscara de la muerte roja" ("The Masque of the Red Death", 1842).

Para mí siempre fue un relato de zombis avant la lettre, muy anterior a la creación de George Romero (y antes, esa maravilla que es “Todos vosotros, zombies” de Robert Heinlein, 1958). Un ecosistema cerrado, un confinamiento concienzudo para eludir a la peste que asola las tierras del príncipe Próspero, la abadía inexpugnable donde él y otros mil nobles dan la espalda al mundo… todo ello primorosamente descrito, excelsamente sugerido, como el baile de máscaras y las siete salas de colores… una ambientación gótica de primera clase y un desenlace demoledor… ¡Qué gran relato!

"El pozo y el péndulo" ("The Pit and the Pendulum", 1842).

No es solo la puesta en escena, implacable en su desarmante sencillez y fatales consecuencias. Es cómo está contado, cómo está descrito, con una precisión modernísima que escritores como King recogerían en sus antologías de relatos. Proto-Escape Room sui generis, toda una pesadilla hecha relato verosímil que he releído una y otra vez tratando de analizar sus maquiavélicos resortes narrativos. No es nada casual que se trate de uno de los relatos más famosos de Poe, un escritor para el cual el siglo XIX se le quedó corto. 

"El entierro prematuro" ("The Premature Burial", 1844).

De los pocos, poquísimos, relatos que me dejaron realmente turbado porque en primer lugar entronca con uno de mis terrores más potentes, el miedo a ser enterrado vivo, y en segundo porque fue la primera vez que leía la palabra “catalepsia”, la pérdida momentánea de la movilidad y sensibilidad del cuerpo. Como un muerto en vida siendo consciente de lo que está pasando.

El relato se lee con mucho interés, pero también con notable angustia, porque el lector no puede parar de empatizar con la situación que vive el protagonista. Al terror cósmico de Lovecraft le puedes coger distancia, y hasta en ocasiones puedes combatirlo, pero a esta clase de terror plausible me resulta muy complicado cogerle distancia alguna. Condiciona, del todo, mis visionados de películas como "Johnny cogió su fusil" (1972) o "Kill Bill Vol. 2" (2004), donde Uma Thurman es enterrada viva. Y "Buried" (2010), por supuesto.

Susana Annasus

Fascinante su vida, y su obra literaria y su mente. Su forma de escribir y todo él. Debía ser una persona con la que hablar y enamorarte perdidamente de todo su ser. Era escritor, poeta, periodista, crítico también. Muchos escritores de ahora han aprendido de él, aprendemos de él sin duda, y un escritor que con sus cuentos de terror ha llegado a nuestras mentes, evadiéndonos de este mundo.

De Poe me fascina como escribe, es hipnotizador, recorres sus palabras y vas adentrándote en el mundo que nos muestra de manera sencilla, pero con un ritmo descriptivo tan bello. Es que es un poeta narrativo, culto. Te evades de donde estés y puedes volver a leerlo, que volverá a cautivarte y transportarte a aquel lugar, y lo sientes, lo vives.

De sus poemas, el poema de “Annabel Lee”, según he leido se compuso en Mayo de 1849, y lo publicaron en Octubre de ese mismo año, tras la muerte de Poe. El escritor se aseguró de que este poema se imprimiera, entregando copia a su albacea literario (Rufus Wilmot Griswold), pagó con él también una deuda de 5 dólares. Algunos biografos piensan que este poema lo escribió por su esposa Virginia, que había fallecido dos años antes. Otros pensaron que era una invención de Poe, y alguna antigua novia creyó que fuera por élla. Se tienen distintas teorías, que sólo él sabrá en quién pensó, quizás lo hizo pensando en mí (toque irónico). Lo que sí es cierto es que es un poema inmortal y eterno que siempre nos acompañará. Hay que leerlo en original, porque es cuando lees más su “musicalidad”.

De sus relatos, “La verdad sobre el caso del señor Valdemar”, publicado en 1842. Llegaron incluso a creer por la descripción tan real de los sucesos. Es uno de los relatos que también me gustan mucho de él porque parece una noticia real de un hecho sucedido. La descripción, cómo cuenta lo sucedido, es fascinante y me gustó muchísimo. Me encanta cómo nos trasmite de manera tan sabia lo que sucede, pero de manera culta y tan sencilla, como quien encuentras y te transmite una información sucedida, que has de creer totalmente y te la crees totalmente.

“La caída de la Casa Usher”, es de esos relatos atemporales, tan hermosos, tan oscuros, pero atrayentes. Es un cuento de terror publicado en 1839, en la revista Burton's Gentleman's Magazine. En 2023 hubo una serie basada en este relato, de 8 episodios. Dirigido por Mike Flanagan y Michael Fimognari. Que bueno, no es para tirar cohetes, pero sí es interesante. Sobre este relato, como todas las obras de Poe, soy sincera es que me gustan mucho sus descripciones y ese halo de misterio siniestro que va creando en sus escritos. La forma en que trabaja sus textos.

¡Fascinante! Y los mencionaría todos sus relatos y sus poemas.

Hay otros muchos conocidos, pero no sé si comentarlos también. Es alguien que se ha hecho inmortal, luchador, fascinador, aunque su aspecto lo hiciera parecer débil. Con una muerte tan extraña, ha sido cautivador, como sus relatos.




lunes, 11 de noviembre de 2024

The Batfinks

 

Banda británica formada por: Geoff (vocal), Fritz (guitarra), Razor (contrabajo), Mick (batería), han sido uno de los grupos más potentes de la escena psychobilly y de los más influentes. Nos legaron dos inmejorables álbumes y una gran participación en recopilatorios. Una banda de culto muy admirada y con un estilo muy personal y original.

Debo aquí hacer un inciso para explicar algo importante que viene al caso. En 1987 el sello Link Records, dedicado al punk, que empezó a lanzar discos de ese género musical en vivo con la serie Live and Loud!. En 1989 encarga a Chuck Harley, alias Chuck "Flintstone”, que fiche bandas de psychobilly y neorockabilly para dicho sello. Por cierto, Chuck Flintstone, miembro de una de las mejores bandas de psychobilly, The Frantic Flinstones, hizo una labor estupenda y en la serie “Chuck Flintstone Present” logró publicar discos de bandas tan buenas como: The Batfinks, los propios Frantic Flintstones, The Tailgators, The Nitros, The Coffin Nails, Stage Frite, etc… También se publicarán estupendos albumes en directo de bandas en esta serie con el título de Live and Rockin´ de The Polecats, The Deltas, King Kurt, The Radiacs, Demented Are Go, … y también de los propios The Batfinks y de los Frantic Flintstones. Una gran labor de Chuck Flintstone. The Meteors, salió en este sello pero con el título del disco Live and Loud!.

El primer álbum de The Batfinks, data de 1989 y se llama Wazzed ´N' Blasted (Day Of The Mushroom), del sello Link Records, como  podéis deducir de mi expositivo anterior, una portada increíble y una contraportada que nos muestra una buena imagen psychobilly del grupo. Estamos ante un disco magnífico e histórico, una obra maestra. Sonidos poderosos que emanan terror como las letras de la banda, eso apoyado en una gran maestría a la hora de ejecutar su música de los cuatro miembros de The Batfinks, hacen un álbum espectacular e imprescindible en la historia de la música. Contiene temas como : “Brain Damage”, “ She´s a Vampire”, “Kali´s Blood”, “Wazzed´N´BLasted”, "Wreck Mutes", etc… Saldría también reeditado en CD en el 2007 por el mismo sello y en la colección referida.

El segundo vinillo de la banda, de 1990, es Live and Rockin´, como ya he dicho también, al igual que los otros de la colección "Chuck Flinestone Present" y es un live sensacional donde la banda demuestra su poderío en el escenario. Un álbum para disfrutar de su increíble directo. Mucha fuerza, mucha potencia y mucha calidad. Ahí podéis escuchar grandes canciones como: “Sleep Kills”, “Raisin´Hell”, “Overdose”, “Suicide”, “Darren”, “Brain Damage”, etc..

Participaron en los recopilatorios: Long Lost Paychobilly, Psychobilly Halloween Freak-out!, Screaming Halloween, Summer Psychobilly Party, Psychos In The System : 15 KIller Psychobilly Tracks, Katz Keep Rocking Volume 1, Rockin At The Take TWo: Volumes 1 &2, Halloween Psychobilly Party.

The Batfinks constituyen una de las bandas fundamentales del psychobilly y de la música, siendo uno delos grupos más admirados. Aunque ahora no existen tenemos el extraordinario legado de sus discos.

Alfonso Carlos López


sábado, 9 de noviembre de 2024

Mis tres favoritas de... Kurt Russell

 

Alfonso Romero

"Tango y Cash" ("Tango & Cash", Andrey Konchalovskiy, 1989).

El canto de cisne de la muscle opera fue esta cinta que miraba al cine de acción de los ochenta con una perspectiva que ni la crítica ni buena parte del público supo comprender. Uno de los grandes títulos del cine de acción de los ochenta cuando la década tocaba a su fin, a la vez que vehículo de lucimiento para dos estrellas tan diferentes como Kurt Russell y Sylvester Stallone, que tienen una química increíble juntos. Secundados por un ramillete de villanos de auténtico lujo, entre los que destacan Jack Palance, James Hong o Brion James. Y con Teri Hatcher demostrando la gran vis cómica que siempre la ha caracterizado, y Michael J. Pollard haciendo de... Michael J. Pollard, ¿cómo no?. A Konchalovskiy lo echaron del rodaje, que terminó Albert Magnoli, pero dio igual, la película ha ganado con el tiempo. Se habló mucho de una secuela, que nunca llegó.

"La cosa" ("The Thing", John Carpenter, 1982).

Uno de los grandes títulos del cine fantástico de los primeros ochenta y un estrepitoso fracaso crítico en su momento. La ceguera de la obstusa crítica no pasó de ver más allá de los (por otro lado maravillosos) efectos especiales gore y lovecraftianos que nos regaló Rob Bottin. De unos años a esta parte se la reivindica (como todo lo de su director, al que muchos sentenciaron y enterraron cuando en 2010 se estrenó "Encerrada"), y le salio una tardía precuela, además de copias entre la serie A y la Z. "La cosa" fue la primera pelicula que alquilamos en casa cuando entró el VHS a finales de los ochenta, y nos estalló (no literalmente, claro) la cabeza. No puedo imaginar esta película sin Kurt Russell de protagonista.

"Los odiosos ocho" ("The Hateful Eigh", Quentin Tarantino, 2015).

Hoy que está tan de moda atacar a Quentin Tarantino es cuando prefiero reivindicar este wéstern, el segundo en puridad en la carrera de su director, que asumía y vampirizaba no sólo el spaghetti-western (como algunos se empeñan en decir) sino todas aquellas parcelas del cinema bis que a su responsable le vino bien aunar en esta ocasión. Russell está genial como John Ruth, ese tipo duro (y no muy caballeroso) encargado de llevar ante la justicia a una peligrosa criminal.

Miguel Romero

Al igual que Val Kilmer, Kurt Rusell empezó de muy joven trabajando en películas para la Disney. Afortunadamente para él, siguió un camino bien distinto. Perfecto ejemplo de cómo envejecer tanto dentro como fuera del cine.

Por decir tres de sus pelis…

“Deathproof” (“Deathproof”, Quentin Tarantino, 2007).

Aunque le dieron el papel del especialista Mike después de que Mickey Rourke abandonara el rodaje, lo bordó. Tarantino volvió a contar con él y Zoe Bell en su western “Los odiosos ocho” (2015) y en su obra maestra “Erase una vez en… Hollywood” (2019), donde ambos hacen, precisamente, de un matrimonio de especialistas… El mundo del señor Quentin…

“Bone Tomahawk” (“Bone Tomahawk”, S. Craig Zahler, 2015).

Si bien la sombra de Tarantino era de lo más alargada, con sus dos primeros trabajos Zahler parecía un tipo totalmente a seguir. Lástima que con “Al otro lado de la ley” (2018) lo tiró todo por tierra. 

En “Bone Tomahawk” Russell es una vez más el sheriff, aquí acompañado entre otros por un viejo ayudante (espléndido como siempre Richard Jenkins) en un papel como los que recordamos del gran Walter Brennan. Se las tendrán que ver con unos indígenas muy poco evolucionados.

“La torre de la muerte” (“The Deadly Tower”, Jerry Jameson, 1975), .

Como tantos de aquellos telefilmes que de niños veíamos los domingos en Estrenos TV, estaba basado en una historia real. Russell encarna al infame Charles Whitman, el asesino que sirvió también de inspiración a Peter Bogdanovich para el de su ópera prima, “El héroe anda suelto” (1968).

Entre los secundarios, Ned Beatty, John Forsythe o Pepe Serna.

Eduardo Álvarez Cónsul

"2013: Rescate en Los Ángeles" ("Escape from L.A.", John Carpenter, 1996).

En esta gran pelicula Kurt Russell vuelve a ser Plisken "el Serpiente". Se estrenó el mismo año que "Indepedence Day" de Robert Emerich, pero las comparaciones son odiosas pues "2014: Rescate en Los Ángeles" se adelantó a su tiempo en muchos aspectos. En el reparto aparecen Stacy Keach, George Corraface, Michael Forbes, Peter Fonda paradodiandose a si mismo, Cliff Roberson y la gran Pam Grier.

"Frenos rotos, coches locos" ("Used Cars", Robert Zemeckis, 1980).

En esta divertida comedia Kurt Russell y su hermano se dedican a la venta de coches .

"Tombstone" ("Tombstone", George Pan Cosmatos, 1993).

En este wéstern aparecido tras los exitos de "Sin perdón " (1992) de Clint Eastwood y "Bailando con lobos " (1990) de Kevin Costner, se cuenta la legendaria rivalidad entre Wyatt Earp y Doc Hollyday frente a la familia Clanton .

En el reparto aparecen el nefasto Val Kilmer, el gran Sam Ellioth y veteranos como Charlton Heston y Powers Bothe.

Alfonso Carlos López

“Deathproof” (“Deathproof”, Quentin Tarantino, 2007).

Dirigida por Quentin Tarantino en el 2007, dentro del género de acción, asesinos en serie y slasher, se basa su argumento en un psicópata que asesina a chicas usando su coche. Protagonizada por Kurt Russell, Zoe Bell, Rosario Dawson, Vanessa Ferlito, Jordan Ladd, Sydney Tamiia Poitier, etc…  Junto a "Planet Terror" de Robert Rodríguez forma parte de “Grindhouse”, toda una gozada ver esos dos trabajos juntos para el espectador. El papel de especialista Mike lo borda Kurt Russell con su coche a prueba de muerte, aunque solo para el asiento del conductor pero  al final tres chicas que iban a ser sus víctimas consiguen sacar su coche de la carretera y matan al psicópata a golpes. Persecuciones, escenas como la  de el juego del “Mástil”,  un ritmo trepidante en su desarrollo, la propia estética del film e incluso la del coche de Mike ese Dodge negro impresionante con la calavera blanca sobre el capot, etc… hacen de ella algo magnífico.

"La cosa"("The Thing", John Carpenter, 1982).

Película de terror y ciencia ficción estadounidense-canadiense de 1982 del director John Carpenter, escrita por Bill Lancaster y basada en una novela de 1938 de John W. Campbell Jr. La trama, muy interesante, se desarrolla en una estación experimental de la Antártida y un equipo de científicos tendrá que enfrentarse a un ser de origen desconocido que va tomando la forma de sus víctimas. Estamos ante un trabajo muy cuidado y que nos adentra en un mundo perturbador en el que confluyen la sensación de aislamiento por el entorno de la Antártida, el horror de ese ser desconocido, y escenas  muy  inquietantes de la ciencia ficción. El reparto muy apropiado: Kurt Russell, Wilford Brimley, T.K. Carter, David Clennon, Keith David, Richard Dysart, etc… El Film tuvo un gran éxito cuando se estrenó en video y es una película de referencia del género.

"Tombstone" ("Tombstone", George Pan Cosmatos, 1993).

Cinta estadounidense de1993 con Kurt Russell, Val Kilmer, Sam Elliot, Bill Paxton, Dana Delany y Michel Biehn. Este excelente wéstern está influenciado por  lo que aconteció en el OK Corral de Tombstone (Arizona) en 1881. Wyatt Earp con sus hermanos y familia llegan en 1879 a la  localidad citada para regentar un bar, habiendo dejado su vida anterior de antiguo representante de la ley, pero será nombrado sheriff y allí se juntará con su viejo amigo "Doc" Hollyday, enfrentándose a los cowboys que hacían antes lo que les venía en gana. Unas escenas grandiosas propias del mejor wéstern. Hará las delicias de todo amante al cine del Oeste y es una película referente del estilo, con una argumento ágil, grandes escenas y buen desarrollo.

Joanna

En casa éramos muy fans de Kurt Russell, y por los ochenta y noventa soliamos ir a ver sus películas al cine o alquilarlas en VHS. Su mera presencia solía ser señal de al menos un buen rato de entretenimiento y buen hacer frente a las cámaras. Y aún hoy es grato verlo, metido en franquicias y multiversos variados como las sagas "Fast & Furious" o "Los Guardianes de la Galaxia", o la serie "Monarch: El legado de los monstruos" (2023-2024). Es muy difícil elegir tres, y para el caso voy a tratar de pasar de puntillas por sus roles más icónicos (junto a Carpenter y tal) para señalar otros de sus trabajos que me gustaron mucho.

"Los reyes del crimen" ("3000 Miles to Graceland", Demian Lichtenstein, 2001).

Kurt Russell, de niño, habia compartido una escena junto al mismísimo Elvis Presley en la cinta "Puños y lágrimas" (1963), y entre finales de los setenta y primeros noventa dio presencia o voz a Elvis en un par de ocasiones. Un buen bagaje para ser uno de los impersonators del Rey del Rock que cometen un atraco en un casino de Las Vegas en "Los reyes del crimen", rodada en un momento en el que tanto su carrera como la de Kevin Costner parecían estar en un punto muerto. "Armas, chicas y apuestas" (2012) copiaba de esta película por todo el morro, ¿o tal vez quiso ser un impersonator?.

"Stargate: Puerta a las estrellas" ("Stargate", Roland Emmerich, 1994).

Después de llamar la atención con la muy disfrutable y reivindicable "Soldado universal" (1992), el "Spielberg alemán" Roland Emmerich se marcó un tanto con esta producción de ciencia ficción que con el tiempo daría lugar a una longeva serie de televisión de gran éxito (pero que nunca me ha dado por ver). Con un reparto muy heterogénero (con Jaye Davidson, de "Juego de lágrimas"), donde destacan los papeles de James Spader y Kurt Russell. Emmerich volvería a intentar una película similar a ésta con "10.000" (2008), pero no convenció al público.

"Breakdown" ("Breakdown", Jonathan Mostow, 1997).

Con un argumento similar al del telefilm setentero "¿Dónde está mi esposo?" (1973), Jonathan Mostow construyó un estupendo thriller de carretera a finales de los noventa. Russell da una interpretación muy acertada como el marido que busca a su esposa (la guapa Kathleen Kinlan), desaparecida en un bar en medio de ninguna parte, y J.T. Walsh y M.C. Gainey bordan sus papeles. A reivindicar.

Malina Murnau

"“Bone Tomahawk” (“Bone Tomahawk”, S. Craig Zahler, 2015).

La debo de poner la primera, me encanta. Wéstern y terror, una combinación estupenda. La primera vez que la ví fue alucinante, me lo pase en grande. Si alguién aún no la vió, ya está tardando.

"Tango y Cash" ("Tango & Cash", Andrey Konchalovskiy, 1989).

Y por supuesto ésta, faltaría más.  Stallone haciendo dúo con Russell, una marvilla de película de acción. Ni sé la veces que he podido visionarla.

"Un mar de líos" ("Overboard", Garry Marshall, 1987).

Una comedia con una Goldie Hawn estupenda (ya sabemos todos que es pareja de Russell) para verla cada cierto tiempo.

Dejo atrás las colaboraciones con Carpenter (me gustan todas). Luego  "Deathproof", "Tombstone" y una larga lista. Otro de esos actores que tienen verdaderas joyitas e imposible quedarse con tan pocas.

Susana Annasus

La primera vez que vi a Kurt Russell y sin saber quién era él fue con la pelicula “Mi cerebro es electrónico”, la tengo por ahi guardada y la busqué para que la vieran mis hijas. Porque me resultó tan divertida... y más aún ahora con los años. Comenzó siendo muy joven, con 11 años, este actor es icónico y creo que hay muchos antes y después para él. Muchos resurgir en su filmografía. Ha hecho series para televisión, cine con diversos géneros...

Para mí Kurt Russell es un actor, que ha gustado, gusta y gustará, porque trabaja con el género que trabaje en el cine, o en televisión, es un tio que siempre lleva su misma sonrisa y carisma, pero que es capaz de salir en “Dead Proof”, en “Guardianes de la Galaxia”, en “Tango y Cash”.... En todos los papeles está que se come la cámara.

Mis favoritas, la primera “La cosa”, de 1982. Dirigida por John Carpenter, está basada en una novela corta de John W. Campbell: “Who goes there?” Para mí su personaje evoluciona en esta película, me gusta mucho, no hay una evolución tan bestial como con el personaje de Ripley en “Alien” pero este personaje tiene una gran evolución. Para mí estaba para él.

Mi segunda favorita es “1997, Rescate en Nueva York”. También dirigida por John Carpenter (¡qué casualidad!) es del año 1981. El personaje de Kurt Russell me encanta, y también él le da su toque especial, junto con el papel de la actriz Adrienne Barbeau (para comerse a los dos).

Supongo que cansado de hacer papeles de Disney, dónde salía como un pijito, con flequillo a decir: despierta la bestia y me como Nueva York, a la cosa, me como la Galaxia y me vuelvo especialista y me cargo a las chavalas de piernas largas....y hasta la Navidad si hace falta... Creo que ahí despertó Kurt Russell, o pensó esto es lo que quiero yo. Ha ido creciendo, ha ido haciendo todo tipo de papeles, comedia, acción, terror, wéstern...Pero resurge, y a veces también se hunde.

Mi tercera favorita es “Dead Proof”, de 2007. Escrita y dirigida por Quentin Tarantino, me gusta porque también pienso que para él es un antes y un después. Porque realizaba todo tipo de géneros, pero en sus películas no brillaba tanto para los espectadores. Es mi sensación, porque como actor me gusta, como imagen icónica también. Aunque le pega sus papeles de malote, su aspecto de malote - bueno. Y en esta película nos atrapaba con sus encantos, pero Tarantino parece que quería decir: “Eeeh! Qué estoy harto! Y me vengo de todos los que no me habeis valorado.” Como si fuera él, un actor mayor de edad, atractivo, capaz de atraer a cualquiera, ya no había películas de tanta acción. Pero q es capaz de comerse la pantalla. Y viene Mike “el especialista”, a vengarse de Hollywood. En esta película es que me encanta Zoë Bell. Y la batalla especialista (en ficción) contra la verdadera especialista. Es que esa escena del coche para mí será siempre mítica. ¡Fascinante! Una verdadera demostración de un gran trabajo por parte de ella. (Malina hay que hablar de esta chica también, ahí lo dejo)

Bueno pues me tiro y digo otra, qué podría decir más, pero bueno las más para mí. Sería también “Los odiosos ocho”, escrita y dirigida por Tarantino. El personaje y la transformación de Kurt Russell aquí me gusta muchísimo, también muchos más actores en esta película me encantan como: Jennifer Jason Leigh, Tim Roth (Love), Michael Madsen, Samuel L. Jackson, pues esta película es que vamos a liarla a base de bien. ¿Y dónde? Pues en la nieve y después de la guerra de Secesión, venga liémosla. Reune todo lo que teníamos ganas, risas, acción, sangre, buenas conversaciones. Y Kurt Rusell aquí no lo ves, porque quizás, pienso que Tarantino lo cubre por completo. Ahora no vamos a ver su imagen icónica, su sonrisa carismática, su cuerpo. Ahora vemos al personaje y la voz del cazarecompensas. ¡Por fin! Es uno de los mejores papeles para él, junto con los que realiza en las otras películas que menciono.

Hasta aquí mi humilde opinión. Hoy debemos ver “La cosa”.

David Cortabarria

Kurt Vogel Russell (1951.03.17)

Actorazo que, dentro del conjunto de locas (pero no tanto) asociaciones mentales siempre vinculo, vaya usted a saber por qué, con Jeff Bridges. Será porque adoro a ambos, porque me encantaría verlos en una descacharrante saga en modo buddy movie, sumergidos en mil y una aventuras. 

Es muy, muy complicado escoger tres películas en las que aparezca Russell, pero si me decanto por la vía pasional, la que entronca con mi ADN de ciencia-ficción, la elección aflora de manera completamente orgánica y natural. 

"1997: Rescate en Nueva York" ("Escape from New York", John Carpenter, 1981) y su segunda parte, "2013: Rescate en L.A." ("Escape from L.A.", John Carpenter, 1996) – Kurt Russell como Snake Plissken.

Simple y llanamente, no hay otro actor que pueda encarnar a Snake Plissken. Esplendorosamente cínico (como un Han Solo sin un ápice de humor y dosis extra de amargura), el superviviente de una Nueva York que Carpenter catapultó al olimpo de las distopías urbanas. No sé hasta qué punto no anticipa al Blade Runner de 1982, porque no es poco lo que le debe Scott a esta pedazo de película. Es un placer enorme ver a Plissken de vuelta de todo, víctima de un encargo que es pura trampa, en un viaje que es un alucinado “Jo, ¡qué noche!” con un plantel de gloriosos secundarios. La primera vez que ves "1997: Rescate en Nueva York" quedas maravillosamente terraformado a nivel mental.

La segunda parte, más bien revisitación/remake, baja el pistón al permitir que aparezca el humor. No es en sí un lastre, pero es una secuela inferior, aunque desde luego gozosa de ver. Plissken sigue con su habitual mal humor, empeorado por el hecho de que la gente le recuerda más alto, como si el director recalcara que el tiempo para su protagonista pertenece ya al pasado. Con todo el bueno de Carpenter aprovecha para repartir estopa con sus críticas sociales, regalándonos una descacharrante escena de Kurt Russell surfeando con Peter Fonda en medio de un escenario imposible. Uno de esos momentos que uno atesora en su Arcadia mental de momentazos que le ha tocado vivir en este mundo onírico del alu-cine. 

"La cosa" ("El enigma de otro mundo") ("The Thing", John Carpenter, 1982) – Kurt Russell como Macready.

A Russell le sienta de fábula ser dirigido por John Carpenter. "La cosa" es una incontestable obra maestra del género, un remake del mítico film "El enigma de otro mundo" (Christian Nyby & Howard Hawks, 1951) que sublima el material original a cotas gigantescas. Todo funciona bien en "La cosa". Russell está imponente, del todo creíble. Porque esa es una de las cosas que más impresionan de esta película. Aparte de lo tremendamente bien que ha envejecido, es del todo real y plausible, pese a lo fantástico de la premisa (tan similar a la del "Alien" de Ridley Scott, por cierto). Ayudan unos muy eficaces efectos especiales a cargo del gran Rob Bottin, y un casting ideal. A ratos es como estar viendo un documental sobre unos pobres tipos atrapados en la Antártida, impotentes ante la amenaza que se les cierne. Y un flipante Russell, perfecto héroe cincelado a la manera de un Ulises que se enfrenta a su odisea personal. 

"Soldier" ("Soldier", Paul W.S. Anderson, 1998) – Kurt Russell como Todd 3465.

"Soldier" es de esas películas que uno acoge en su refugio cinéfilo sin pensárselo mucho, atraído por su propuesta, y por descontado por la presencia de Russell. Ya luego cuando uno descubre que la película forma parte del universo de "Alien"/"Blade Runner" comprende que hay serendipias sumamente afortunadas. Casi un replicante que no superaría el test Voight-Kampff, Todd 3465 es encarnado por un actor que en esta ocasión opta por un registro frío e hierático, como de hecho corresponde a un soldado-ronin que ha sido concienzudamente programado para asemejarse a un robot. Descastado y declarado obsoleto, se supera a sí mismo, recuperando su humanidad y empatía. Y mira, hasta consigue que el espectador se lo crea. Película a día de hoy muy olvidada, y es lástima, porque merece ser reivindicada. 

Para los aficionados a los guiños que abren un mundo de posibilidades… dadle a la pausa en la escena de la chatarrería, a ver si reconocéis dos elementos muy comunes en la saga de "Blade Runner". Y no dejéis de leer el tatuaje que lleva Todd 3465 en el hombro. Roy Batty os manda recuerdos.

Carlos Enríquez

Para mí, Kurt Russell es uno de los actores más representativos del cine de acción y ciencia ficción. Como curiosidad, está casado con la simpatiquísima Goldie Hawn, una actriz estupenda con quien lleva más de cuarenta años (algo bastante atípico en Hollywood). Nuestro amigo Kurt Russell trabajó durante los ochenta con uno de los directores más prolíficos y estimulantes del fantástico y el terror (sí, Carpenter, lo habéis adivinado), para quien protagonizó tres películas emblemáticas (al menos en mi humilde opinión) y que marcaron una época en mi vida de espectador. 

No me enrollo más, vamos con LAS TRES:  

"La cosa" ("The Thing", John Carpenter, 1982).

La primera de estas películas es "La cosa", ¡no podía ser otra! De esta cinta ya se ha hablado bastante por aquí, pero bueno, daré unos datos. Estrenada en 1982, ha pasado a ser peli de culto y obra maestra del terror y la ciencia ficción (a pesar de ser un remake). Russell interpreta a R. J. MacReady, un piloto de helicóptero en una estación de investigación en la Antártida. El bueno de MacReady se las verá con una criatura alienígena capaz de asumir la forma de cualquier ser vivo que pulule por los alrededores. En la peli concurren muy buenos actores, pero Russell siempre está ahí en sus escenas, atrapando los ojos y la mente del espectador, gracias a su valentía y a ese aire de tipo solitario y bohemio que se convierte en líder de los supervivientes.

"1997: Rescate en Nueva York" ("Escape from New York", John Carpenter, 1981).

Otra de las películas en las que sobresale la destreza de Russell en papeles de puro antihéroe es "1997: Rescate en Nueva York", estrenada en 1981. Aquí interpreta a Snake Plissken, un exsoldado convertido en delincuente y mercenario que debe rescatar al presidente de los Estados Unidos en una ciudad de Nueva York convertida en prisión de máxima seguridad. Con un parche en el ojo y una actitud irreverente, el personaje de Plissken se convirtió en un ícono del cine de acción que bien podría haber dado lugar a una saga tipo "Mad Max", pero la cosa se ha quedado en dos películas. Esta cinta destaca por su atmósfera, pienso. Recuerdo moverme de pequeñajo con mis padres por el metro de Madrid y ver los carteles que anunciaban el estreno, algo que me causaba cierta congoja, pues sabía que ir a los cines de Gran Vía, aunque fuera con mis amiguetes, me quedaba lejos. Disfruté de la peli años después y me encantó el personaje frío y carismático que interpreta Kurt Russell. 

"Golpe en la pequeña China" ("Big Trouble in Little China", John Carpenter, 1986).

Finalmente, elijo como tercera opción "Golp en la pequeña China", de 1986. Esta sí que la vi de estreno en un cine de Huelva (viví allí un par de años). Kurt Russell interpreta a Jack Burton, un camionero despreocupado y fanfarrón que se ve envuelto en una aventura con tintes sobrenaturales en pleno barrio chino de San Francisco. A diferencia de otros papeles que ha interpretado, aquí Russell da vida a un personaje con mimbres de caricatura, con una actuación cargada de humor y con sabor a parodia de héroe, en un tono que aúna comedia, acción y elementos fantásticos. Me encantó la mezcla de géneros, lo cachondo del personaje y el ritmo de la peli. 


Jorge Arincón

"La cosa" ("The Thing", John Carpenter, 1982).
Carpenter decidió hacer un remake de "The Thing", conocida aquí como "El enigma de otro mundo". Si ya la original era fabulosa, ésta para mi incluso consigue superarla. 
En el remake se prescinde del romance que estaba metido con calzador en la original y los protagonistas son todos masculinos. Se crea una atmósfera de tensión de todos en esa estación polar desconfiando unos de los otros irrespirable. Y los efectos especiales aún hoy, pasados los años, siguen siendo impactantes. Entre todos los protagonistas, brilla con luz propia Kurt Russell en el que para mí es su mejor papel.

"1997: Rescate en Nueva York" ("Escape from New York", John Carpenter, 1981).
La imagen de Kurt Russell con el parche interpretando al Serpiente es icónica dentro del cine de acción. Una vez más, bajo las órdenes de Carpenter, Russell destaca en uno de sus films más recordados.
La película es pura acción sin descanso y con Russell interpretando a ese tipo de héroe descreído al que envían a una misión poco menos que imposible que se empeña en cumplir.

"Guardianes de la Galaxia Vol.2" ("Guardians of the Galaxy Vol.2", James Gunn, 2017).
Me encantan las dos primeras películas de esta saga, que aportaron frescura, humor y acción además de unas grandes interpretaciones y unas geniales bandas sonoras. Una pena la conclusión con una tercera parte flojisima, en la linea de todas las películas de Marvel en los últimos tiempos.
En ésta segunda parte Kurt Russell interpreta al añorado padre reencontrado por el protagonista. Finalmente resulta ser un auténtico cabroncete, papel que a Russell le sienta como anillo al dedo.


Oscar "Woody" Correa

Hablar de Kurt Russell es hablar de una carrera completa dedicada al cine, en mi caso identificado en los papeles de malote de los años 80, donde dio un giro hacia roles más serios y complejos, mezclando sus apariciones en el universo de John Carpenter, "1997: Rescate en Nueva York" (1981) y "La cosa" (1982), y en otro tipo de cine más comercial como un símbolo de los héroes duros y oscuros de la época (irrepetibles) en los años 80 y 90, consolidándolo en el cine de acción y ciencia ficción, como "Golpe en la pequeña China" (1986), "Tango y Cash" (1989), y "Stargate: Puerta a las estrellas"… Y terminando adaptándose a los cambios en la industria en los 2.000, colaborando con ilustres como Quentin Tarantino, o entrando al Universo Cinematográfico de Marvel. Lo mismo le dan héroes que villanos, no sabría con cuales quedarme, pero pongo estas 3 por bloques:

“Deathproof” (“Deathproof”, Quentin Tarantino, 2007).
Dentro del bloque reciente de películas de Quentin Tarantino, ¡ésta es la mejor! Russell interpreta a Stuntman Mike, un psicópata que usa su auto como arma. Aunque es una de las películas menos convencionales de Tarantino, el papelón que llega a interpretar de villano carismático y aterrador, dándole un toque extra con Tarantino.

"1997: Rescate en Nueva York" ("Escape from New York", John Carpenter, 1981).
Dentro del bloque de películas dirigidas por John Carpenter me quedo con ésta, que consolidó a Kurt Russell como un símbolo de los héroes cañeros de los años 80. Interpreta a Snake Plissken, un antihéroe cínico y rebelde que debe acudir al rescate en un Nueva York convertido en una prisión caótica. El personaje de Serpiente, con su parche en el ojo y su actitud macarra única, llegó para ser un ícono de la cultura pop.

"Stargate: Puerta a las estrellas" ("Stargate", Roland Emmerich, 1994).
La pongo en el bloque de “Otros” y porque es una de mis pelis favoritas de las que ver de vez en cuando. Kurt Russell lidera una expedición a través de un portal que conecta la Tierra con un mundo alienígena, pero con una mezcla de géneros, ciencia ficción, aventura y mitología que de verdad engancha y que además dio origen a una extensa franquicia de series de televisión y otros medios…. Y no he podido poner "Tango y Cash" :-(



miércoles, 6 de noviembre de 2024

Isaac Rother & the Phantoms


 La banda estadounidense, de California, Isaac Rother & the Phantoms se crea en el 2012, y desde entonces no han parado de actuar con mucho éxito entre el público. Beben de las fuentes del R'n'R de los años 50 y 60, definiendo su música como ghoulish Rock´n´Roll, una mezcla de rockabilly, garage y surf, muy influenciados por The Cramps, las películas de serie B y las horror movies, especialmente las retro, resultando un cóctel apasionante. Como ya digo, el terror forma parte de las composiciones del grupo. Las portadas de sus discos, o la imagen del propio Isaac Rother, abunda en este estilo, a destacar la capa que suele llevar.

Han publicado diversos trabajos como: The Unspeakable Horror of… (2015), The Terrifyingn Return of… The Firsst Five Years(2017), Get Reaurrected (2013)… y diversos singles como : "Ghost Party” (2024), "Like A Wolfman" (2024), "House of Wax" (2023), "Black Cat" (2022)...


La banda ha realizado conciertos en Europa diversas veces, y han girado con artistas de la talla de: Dick Dale, Wanda Jackson, Guitar Wolf, King Khan & BBQ Show…

Temazos como : "The Phantom", "I´m a Ghost", “Gators in the Pool”, "Possesion”, ”Kiss of Death”, "Yip Yip Sharaw”, “Hitman”, "Ghoulish Love", etc…. Por cierto, tienen un videos increíbles con unas canciones fabulosas como el ya citado "The Phantoms", "HeeBy Jeebies", "Haunted Castle"…

Su R´n´R macabro es sumamente interesante y ofrecen una puesta en escena magnífica. El frontman y líder, cuyo nombre real es Harley Isaac Rother, es un auténtico showman, un gran cantante, guitarrista y compositor, arropado por una excelente banda. Como el mismo dice en la página del grupo:  ” No nos importan los Oscar, nos importa Bela Lugosi, Vincent Price y Vampira”.

Conjugan unos sonidos cuidados e interesantes y una gran calidad como músicos con una extraordinaria producción. A resaltar ese lado oscuro y salvaje del R'n'R aderezado con la pasión por el terror de este conjunto que tanto nos gusta. El pop art de sus discos, carteles y merchandising está igualmente  muy logrado y muy en esa línea de R'n'R terrorífico.

Una banda de culto que hará las delicias de los más exigentes y que tiene todos los ingredientes para entusiasmar. Realmente magnífico su ghoulish Rock ´n´Roll. Sus discos son joyas y están en el ranking de lo mejor que se ha hecho. Isaac Rother and the Phantoms, mucho talento, mucho nivel y mucha creatividad…

Alfonso Carlos López





sábado, 2 de noviembre de 2024

Mis tres favoritas de... Mariano Ozores

 


Malina Murnau

El más difícil de todos, al menos para una servidora. Los que me conocen o me conocen un poco saben de sobra que soy una fan total de Mariano Ozores, como de su hermano Antonio (el mejor), y elegir sólo tres me resulta casi imposible. Pero después de mucho darle al tarro y sacrificar auténticas joyas, me decido por estas tres.

"Operación Secretaria" (1966).

La tengo que poner sí o sí, para mí es una auténtica perla del cine español. Con mi adorado José Luis López Vázquez y la estupenda Gracita Morales (injustamente olvidada, por casi todo el mundo) no sé las veces que he podido ver esta película, la adoro. Aunque el mismo director hizo en 1974 otra adaptación, "Fin de semana al desnudo", con Alfredo Landa y Lina Morgan y con su hermano Antonio y una guapísima Helga Line, y que, ojo también me gusta. Pero para mí es inferior, me quedo con la del 1966.

"El liguero mágico" (1980).

Otra que no puedo sacrificar. Es una puta pasada, un descojone total. Una comedia de "terror" (¿se puede pedir más?) con el gran Antonio Ozores y otro peso pesado que es mi amado Andrés Pajares. Y junto a otros secundarios de aúpa hacen una delicia visionarla cada cierto tiempo. La escena de las pirañas en la bañera o en los ataúdes son únicas, y te entra unas risas que para qué. Risas y disparates (y por supuesto despelotes) hace que sea una de mis comedías preferidas de todos los tiempos.

"Los bingueros" (1979).

Y es que la tengo que poner. La primera que hicieron juntos "Pajares y Esteso" (otro grande), una comedia estupenda de cómo se querían vivir los cambios de esa época. Por fin se podía jugar, y había cachondeo y tías desnudas. Y encima meter a estos dos grandes, y por supuesto a su hermano Antonio, pues crea una de las películas más rentables del cine español. Se pongan como se pongan. Una gran película que daba inicio a una de las parejas cómicas más queridas, u odiadas según se mire, que ha dado nuestro cine. "Grande Mariano Ozores".

Y como escribo en el comienzo de mis tres favoritas de esta semana, me es muy fuerte dejar tantas y tantas películas que me gustan de este gran director. Pero por gustos y por otros motivos creo que he escogido tres grandes películas. 

Alfonso Romero

El fracaso económico de “La hora incógnita” (1964) convenció a Mariano Ozores a partir de entonces a realizar las películas para el público, colocando a la crítica en su contra a lo largo de una larga y fructífera trayectoria tras las cámaras. Cintas que reflejan, radiografían, la historia de un país. La implantación en los ochenta, durante el gobierno del PSOE, de la llamada “Ley Miró” afectó gravemente a este director y a su modo de hacer y ver el cine.

“Alcalde por elección” (1976).

La doble moral y la hipocresía de una España que pretendía aún ser algo que no era puestas sobre el tapete, en forma de comedia, en una cinta que, no obstante, está hoy bastante olvidada y poco reconocida. Alfredo Landa da el tipo como nadie encarnando a este españolito de alta moral de cara a los suyos, y que realmente aprovecha su posición para pegarse sus correrías con la amante. Ozores, como hacía Jesús Franco, recicla ideas, personajes, lugares y situaciones de otros títulos suyos anteriores.

“Alcalde por elección”, por otro lado, forma un programa doble estupendo con “El alcalde y la política”, de Luis María Delgado.

“Los bingueros” (1979).

Primera unión profesional en la gran pantalla de Andrés Pajares y Fernando Esteso. Una divertida comedia que, no obstante, refleja perfectamente una España cambiante, la de la Transición, en la que empezaba a legalizarse el juego, a la vez que eran los tiempos del “destape”. Un bombazo comercial en su momento que, por supuesto, llevó a la crítica a tirarse de los pelos.

Un par de años después, Ozores se copiaría a sí mismo en “Los liantes” (1981).

“Operación secretaria” (1966).

Primera entrega de la trilogía “Operación...” y una mirada en forma de comedia al machismo y la represión sexual propia de un país sumido en una larga dictadura bajo el yugo del dichoso nacionalcatolicismo. José Luis López Vázquez, uno de los actores fetiche del director durante los sesenta, clava su papel de empresario/depredador que incluso puede mirarse como una crítica a unos tiempos en los que el trabajador no tenía cómo defenderse ante la patronal (¿valía para algo el sindicato vertical acaso?). Por supuesto que Mariano Ozores “remakeó” esta película posteriormente.

Miguel Romero

Me pongo a mirar la programación del Canal Somos y pierdo la cuenta de cuántas películas ponen a lo largo del mes de las que dirigiera Mariano Ozores. Sin duda siguen interesando al público.

Ninguneado por los medios, finalmente le dieron su merecido Goya honorífico. Las nuevas generaciones odian sus películas de los años 80, principalmente por la falta de personalidad y de cultura de estos “afectados”. Y eso es algo muy triste hoy día que se tiene toda la información al alcance de la mano, en el móvil, vamos, que es lo único que leen…

Como es imposible elegir tres de tantas que dirigiera este todoterreno del cine, me inclino por las primeras que se me ocurren.

“La hora incógnita” (1964)

Remake inconfeso de “La hora final” (1959), de Stanley Kramer. 

Para el reparto el director contó con su familia carnal y política, Jose Luis y Antonio Ozores, Emma Penella, Elisa Montes, Rafael Arco… y otros actores bien conocidos como Fernando Rey, la esposa de éste, Mabel Karr, o Jesús Puente, entre otros.

Declaraba Ozores que se le había subido el éxito a la cabeza y se sentía Frank Capra, por lo que dirigió ésta. El batacazo fue tan grande que estuvo muchos años pagando la deuda. Desde entonces sólo le daría al público lo que éste quería.

“Los energéticos” (1979)

La segunda película protagonizada por Pajares y Esteso tras “Los bingueros”, de ese mismo año, y es que se hacían muy deprisa aprovechando los temas que estaban de moda. Pongo ésta no por el famoso incidente con Ajita Wilson, sino porque es de la que más chistes se me vienen a la cabeza.

“Nosotros los decentes” (1976)

Protagonizada por José Luis López Vázquez y la Carmen Sevilla de aquellos años (la que quería romper con la imagen que todo el mundo tenía de ella, haciendo papeles mucho más sexys y arriesgados), una crítica a la hipocresía de la gente, al qué dirán. Desde luego viene que ni pintado…

Eduardo Álvarez Cónsul

"Al este del oeste" (1984).

En esta divertida parodia del chorizo-western Fernando Esteso es Bill “Pistolas de oro”, y hasta canta la canción al comienzo y al final de la película. En el reparto aparecen Antonio Ozores, Juanito Navarro, Emilio Fornet como el sheriff que dimite cuando hay problemas, las hermosas vedettes África Pratt y Ariadna Vega, los veteranos Conrado San Martín y Fernando Sancho (éste en su eterno papel de mexicano sucio y peleón).

"Brujas mágicas " (1981).

En esta película protagonizada por Andrés Pajares y ambientada en el siglo XV con la Inquisición en pleno apogeo castigando herejes no falta de ninguno de los ingredientes del cine de Mariano Ozores: chistes de la actualidad, escenas picantes y reprimidos aprovechados. En el reparto no faltan los de siempre: Antonio Ozores, Francisco Camoiras, Paloma Hurtado, Ángel de Andrés, Emilio Fornet, y las hermosas Azucena Hernández, Pilar Alcón, Adriana Ozores y María Casal.

"Veneno que tú me dieras” (1989).

En esta película Antonio Ozores y Juanito Navarro son dos farmacéuticos bastante salidos que por error venden a una chica un medicamento mortal y la buscan durante toda la película. En el reparto aparecen Simón Cabido como el jefe de los protagonistas, Quique Camoiras, Maria Casal, y la hermosa vedette morena Rosina Pantoja en su clásico papel de prostituta voluptuosa.

Jesús Manuel Pérez Molina

Mi primer contacto con el cine de Mariano Ozores se produjo en el año 83, cuando mis primos mayores me llevaron con ellos al cine y en taquilla no se decidían si ver “¡Qué vienen los socialistas!” (1982) o “La verdadera historia de Frankenstein” (1973), aquel telefilm de Jack Smight con James Mason y Jane Seymur que se resumió en una película estrenada en pantalla grande. Al final acabamos con Frankenstein y mi bautizo con el cine de terror... Poco después, de nuevo en el cine de verano por fin entró en mi vida Mariano Ozores con una de sus pelis que se convirtieron en una de mis favoritas:

“La loca historia de los 3 mosqueteros” (1983).

Junto con “Ni te cases ni te embarques” (1982) la mejor peli de Martes y 13. Mariano Ozores rodea al trío televisivo con actores cómicos habituales de sus comedias, que hacen que los protagonistas brillen mucho más que en la comedia de Javier Aguirre. Antonio Ozores borda a un Cardenal Richeleu con aerofagia y Nadiuska es una despendolada Milady de Winter. Las situaciones, los chistes, los números musicales y todos los actores secundarios o en cameos amistosos funcionan a la perfección de la misma manera que lo hacían en “Cristóbal Colón, de oficio... descubridor” (1982).

“40 grados a la sombra” (1967).

Esta película de episodios siempre me ha parecido perfecta para ver en programa doble junto con “Novios 68” (1967) de Pedro Lazaga, ya que comparten la misma estructura y casi al mismo reparto. Mención especial al episodio protagonizado por José Luis López Vázquez como peluquero que se hace pasar por mariquita y que se queda de Rodríguez en Madrid mientras envía a su familia a la playa. Simplemente sublime, aunque el protagonizado por Alfredo Landa como ligón turista de montaña le sigue de cerca. El episodio con Antonio Ozores y Gracita Morales como turistas playeros no está mal, pero pierde en comparación con los otros dos con un componente de picaresca típica española ausente en éste.

“El calzonazos” (1974).

La obra maestra de Paco Martínez Soria. Una película que bien podría haber sido un libro del siglo de Oro español. Una de mis pelis favoritas no sólo de Ozores, sino de todo el cine español desde sus inicios hasta hoy. La historia de un hombre sometido por su esposa que se ve obligado a hacerse pasar por un loco peligroso para salvar a su familia, lo que le queda de hacienda y a sí mismo... Una película que debería de ser de obligada visión desde la adolescencia.

Joanna

“Venta por pisos” (1972).

Un “13 Rue del Percebe” o, si se quiere, un precedente de series como “Aquí no hay quien viva” (2003-2006) o “La que se avecina” (2007-), que sirve a Mariano Ozores para reírse y hacernos reír del desarrollismo que vivía el país en los primeros setenta. Con un reparto fabuloso en los que todos (¡todos!) están en su justo papel.

“Brujas mágicas” (1981).

La primera película que vi en un cine de verano de Andrés Pajares (que no de Ozores, de quien ya había visto alguna más) fue esta comedia tan propia de su tiempo que levantó el aplauso, e imagino que algo más dados los desnudos incluidos, entre el público asistente. La plantilla propia de Mariano Ozores arropaba a Pajares una vez más en esta jocosa parodia de los tiempos inquisitoriales de este nuestro país, tan proclive a reírse de todo, hasta de las mayores desgracias.

 “Objetivo: BI-KI-NI” (1969).

Deliciosa parodia de los films de James Bond y demás euro-espías, con la pareja José Luis López Vázquez y Gracita Morales de protagonistas, que es utilizada por Mariano Ozores para una nueva mirada jocosa a las obsesiones y carencias del españolito medio.

José Luis Salvador

"La hora incógnita" (1963).

Otro Mariano Ozores pudo haber existido. Como es sabido, fue el fracaso en taquilla con el que se saldó esta historia apocalíptica de corte humanista, producida por el propio director junto a sus hermanos, la que determinó que a partir de entonces se dedicara en exclusiva a la comedia comercial. Una lástima, pues en "La hora incógnita" demuestra su mano para la construcción de personajes, la dirección de actores y la puesta en escena, y su buen manejo del melodrama y el suspense. En vista de sus resultados, hay que caer en la tentación de fantasear pensando que habría sido de la carrera de Mariano de ser el film un éxito y hubiera continuado realizando este tipo de propuesta de cine serio. Claro, que de ser así hubiéramos perdido la mayoría de esas comedias por las que muchos le admiramos.

"Fin de semana al desnudo" (1974).

A lo largo de su carrera fueron varias las ocasiones en las que Mariano Ozores realizó nuevas versiones de films propios, posiblemente motivado por su prolificidad. De entre ellas, destaca este remake de la ya de por sí notable "Operación secretaria" (1966), un thriller cómico que, para quien esto escribe, se erige en el mejor exponente de comedia de enredo que el director frecuentara desde su ópera prima, la excelente "Las dos y media y veneno" (1959), y que se apoya en la peculiar relación que mantienen a lo largo del metraje su pareja protagonista, formada por Lina Morgan y Alfredo Landa en sustitución de los originales Gracita Morales y José Luis López Vázquez. Ambos intérpretes son excelentemente acompañados por el buen hacer de un reparto compuesto por tres secundarios de la talla de Antonio Ozores, tan gracioso como siempre, Helga Liné y Máximo Valverde, encargados de poner la nota serie en la función, más el concurso de los actores venezolanos Toco Gómez y una Haydée Balza, cuya rotunda presencia, unida al minivestuario que porta, quita literalmente el hipo.

"Los liantes" (1981).

Aunque siempre se suele citar a "Los bingueros" a la hora de hablar de la serie de películas dirigidas por Mariano Ozores con Andrés Pajares y Fernando Esteso (y viceversa) de protagonistas, quizás por eso de ser la primera de sus colaboraciones, mi preferida es, sin ninguna duda, esta versión ampliada y corregida de aquél fundacional título, que cambia los bingos del original por las salas de juego. El rodaje adquirido por el trío en el tiempo transcurrido se deja notar en un film mucho más fresco y dinámico que se beneficia de la química creada entre los dos intérpretes y unos chistes mucho mejores, engarzando secuencia brillante tras secuencia brillante. No en vano, momentos como el timo de la alarma, el coche que anda sin gasolina o todas las escenas que transcurren en la mesa de la ruleta se inscriben por derecho propio entre lo más granado de la filmografía de su responsable.

Alfonso Carlos López

“40 grados a la sombra” (1967).

Película de 1967 dirigida por Mariano Ozores que, en clave de sátira, refleja distintas historias relacionadas con el verano y los veraneantes. Jacinto (José Luis López Vázquez) que mientras deja a su familia en la playa se embarca en el frenesí del ligoteo en las noches de la ciudad, y las peripecias de Máximo (Alfredo Landa) en el campo detrás de la guapa vecina del chalet contiguo, siendo ambos casos una parodia desternillante del "Rodríguez". Evaristo (Antonio Ozores) y Filomena (Gracita Morales) pasarán un calvario cuando su reserva de hotel es denegada y les prestan una habitación un matrimonio joven. Una comedia sobre los tópicos del estío, la verdad, muy divertida y con situaciones hilarantes.

“El ligero mágico” (1980).

Estrenada el 19 de diciembre de 1980, este film de Ozores ambientado en el siglo XIX, conjuga los elementos de una rica y tétrica mansión con los desnudos propios de le época del “destape”. El tío de Alicia (Adriana Vega), Don Marcelo (Antonio Ozores) lega a ésta la referida mansión como herencia, encontrándose con una serie de criados extraños y hostiles que quieren hacerse con el inmueble. Una obra muy representativa de esta época del llamado “destape”, donde la espectacular Adriana Vega protagoniza diversos desnudos. Contó con la propia Vega, Andrés Pajares, Blaki, Alexia Loreto, Adriana Ozores, Antonio Ozores, María Isbert... Muy acertado el argumento de una mansión en mitad de la nada, con una pasante de notario al que quieren asustar los sirvientes para que se vaya junto a la heredera legítima porque en dicha casa está escondido un tesoro de monedas de oro.

 “El calzonazos” (1974).

Cinta jocosa con un Paco Martínez Soria siempre maravilloso en sus papeles. Esta vez interpreta a Don Juan Alcántara. La trama es que este personaje está completamente dominado por su mujer, su suegra, su cuñada y el hijo de ésta, decidiendo rebelarse para solucionar la situación. Para ello finge estar loco para asustar a su familia, hacer lo que él quiera y también tratar de evitar el matrimonio de su hija Regina, ya que se entera de que el padre del joven es un timador.  Aquí tenemos en el elenco, además de a Martínez Soria a: Florinda Chico, Mari Carmen Prendes, María Kosti, Luis Varela, Alfredo mayo, Emilio Laguna… Graciosísimas escenas a cargo del protagonista fingiendo su locura con el correspondiente pavor de su familia, que hasta entonces lo había tenido sometido.

Mariano Ozores ha sido muy prolífico y tuvo grandes éxitos de taquilla, como Los bingueros” (1979) y películas muy reseñables como: “Brujas mágicas” (1981), “Fin de semana al desnudo” (1974), “Manolo la Nuit” (1973), …

Esther Checa

Es flipante lo productivos que pueden ser algunos directores, tal como el caso que nos ocupa. Da la impresión de que no han parado ni un minuto.

De Ozores destacaría el tipo de films ligeros que nos han hecho reír durante generaciones.

“Al este del oeste” (1984). 

Hilarante, sobre todo Juanito Navarro de indio, con un guion rapidísimo cargado de “retranca”. No pierde con el tiempo, sino que gana.

“Yo hice a Roque III” (1980).

Con bastante descaro e igualmente una oda a la parodia y a autoparodia bastante acusada, ha conseguido convertirse en quasi-culto.

“Los bingueros” (1979).

Más de lo mismo, otro desenfreno neuronal para pasar un rato de despiporre y sátira.

Carlos Enríquez

Antes de nada, debo decir que, aunque el estilo y las temáticas del director Mariano Ozores no coinciden demasiado con mis gustos personales, reconozco que su obra es parte esencial de la historia del cine español. Todo ese humor popular y su enfoque costumbrista son fiel testimonio de una época y mentalidad. Al final, el cine refleja las inquietudes y los valores de la sociedad, en este caso la de nuestro país, bastante constreñida por las circunstancias políticas. Así que, aunque las películas de Ozores hayan sido consideradas «vulgares», es innegable que lograron conectar con el público y capturar una parte de nuestra mentalidad colectiva.

Además, reseñar que cuando veía cine de Ozores lo hacía más bien porque me gustaban los actores y actrices que trabajaron mucho con él, como José Luis López Vázquez, Florinda Chico o el gran Alfredo Landa; o sea, que lo hacía sin ser consciente de quién escribía y dirigía aquellas películas. Y, claro, cuando empecé a ver cine a principios de los años 80, supongo que me atraía la idea de ver a Pajares y Esteso rodeados de tanta turgencia femenina, algo que solo hacían los mayores y que yo ansiaba por eso de descubrir algunos de los misterios de la vida.

En cuanto a las tres que tenemos que elegir: 

Los bingueros (1979)

Inevitable nombrarla por las razones antes expuestas. Un gran éxito comercial —algo de lo que por aquel entonces yo no era consciente— y que yo visioné con la complicidad de un vecino mío porque se había quedado solo en casa. Menudo cuadro, los dos con los ojos como platos y rebobinando adelante y atrás con aquellos viejos vídeos sistema BETA/2000 para poder ver bien todo lo que «destapaba» la cinta de marras.

Todos al suelo (1982).

Considero esta película desternillante, una parodia del cine de atracos, pero en plan chapuza made in Spain, que aprovecha para mostrar tópicos de la época y situaciones y diálogos absurdos. Me trae recuerdos porque la vi en un cine de verano y me reí mucho. No sé si me gustaría al visionarla hoy día, reconozco que me da un poco de pereza intentarlo.  

Pelotazo nacional (1993). 

Esta no podía faltar en la lista, por aquello de estar la ciudad de Sevilla metida de por medio y el tema de la Expo. Es una de las películas más modernas de Mariano Ozores, y lo cierto es que te encuentras gags y diálogos tan absurdos que te partes de risa, lo cual no deja de ser una genialidad. Como siempre, Ozores aprovecha para montar una caricatura de los complejos patrios más arraigados: el ansia por el pelotazo económico fácil, la especulación urbanística, la picaresca española «de guante blanco», corrupción política… aderezado todo con mucho destape. Esta película la tengo por ahí en un disco duro dando tumbos desde hace años, pero nunca me da por revisionarla. ¡A ver si con esto de las listas me animo!

Fernando Rodríguez Tapia

Creo que es la primera vez desde que participo en esta sección que lo voy a hacer desde el recuerdo dado que muchas de estas películas las tengo perdidas en la memoria salvo la primera elegida que la he podido ver más recientemente en varias ocasiones. Mariano Ozores es uno de los pilares del cine español entendido en su faceta más comercial. Renegar de él o denostarle es eliminar una parte esencial de la conexión del cine con el público, algo que este realizador siempre tuvo muy en cuenta creando algunos de los títulos más populares y taquilleros en la cinematografía española. Es innegable su honestidad profesional, y ha creado también cierta escuela porque es indudable que muchas comedias de los últimos treinta años que han triunfado en taquilla tienen su evidente influencia, por más que algunos de sus creadores se nieguen a reconocerlo. Además, forma parte de un familiario muy relevante en el devenir del cine español.

"La hora incógnita" (1963).

La película más insólita de su filmografía y aquella que los que no se asoman ni por asomo a su obra acaban reconociendo sus indudables logros. El miedo atómico origina una fábula existencial muy humanista con una galería de personajes muy cercanos mientras asistimos a sus vivencias al límite del apocalipsis. Una distopía costumbrista, con guion del propio realizador, estupenda fotografía de Godofredo Pacheco y un reparto excepcional digno de enmarcar:  Emma Penella, José Luis Ozores, Antonio Ozores, Carlos Ballesteros, Mabel Karr, Fernando Rey, Elisa Montes, Luis Prendes, Mercedes Muñoz Sampedro, Carlos Estrada, Enrique Vilches, Rafael Arcos, Julia Martínez y María del Carmen Prendes. 

"Cristóbal Colón, de oficio... descubridor" (1982).

Posiblemente la mejor y más divertida de las comedias de los ochenta en las que se mezclaban personajes y acontecimientos históricos con referencias a la situación política del momento. Versión cafre del cine propuesto por los Monty Python sin obviar tampoco a los ZAZ, astracanada en estado puro con momentos memorables, canciones para el recuerdo y algunos gags que demuestran la capacidad innata del realizador para manejar la parodia. Excelente reparto presidido por un entregado Andrés Pajares muy bien acompañado por Fiorella Faltoyano, María Kosti, Rafaela Aparicio, Ángel De Andrés, Roberto Camardiel, Quique Camoiras, José Carabias, Alberto Fernández, Antonio Garisa y Manuel Gómez Bur. Me han entrado ganas de volver a verla....

"Al Este del Oeste" (1984).

Otra divertida parodia en esta ocasión centrada en el wéstern al servicio de la comicidad del gran Fernando Esteso. Vista en un cine de sesión continua en la década en que se estrenó, guardo buen recuerdo de ella dada la capacidad de su autor a la hora de jugar con humor y cierto escarnio por los lugares comunes del cine del oeste. Imposible de olvidar a Juanito Navarro haciendo el indio, Antonio Ozores ejerciendo el habitual funcionariado cómico en las obras de su hermano y presencias tan destacables como Conrado San Martín, Adriana Vega, Fernando Sancho, Luis Barbero, Victor Israel o Emilio Fornet. 

P.D.: Lamento haber perdido en una mudanza el estimable libro de memorias que el cineasta escribió hace unos años. Un magnífico testimonio de una vida dedicada a su gran pasión por contar historias y hacer al publico más feliz con ellas.

Oscar "Woody" Correa

El denostado y prolífico Mariano Ozores cuenta en su haber con unas 100 películas dirigidas, sobre todo de comedia popular, pero ha dejado huella en la industria (Goya de honor incluido) y en el público de varias generaciones (entre ellas la mía), al que ha acompañado casi como una única propuesta cinematográfica en alguna de las décadas… La mayoría de su filmografía se ha basado en la comedia popular sin pretensiones (a veces demasiado burdas, eso si), por lo que se le asocia inmediatamente, adaptándose a lo que requería cada época. Pero también ha hecho incursiones en la crítica social, de cantantes del momento (Peret, Manolo Escobar…) o incluso la ciencia ficción"La hora incógnita"). Entre la inmensa lista me quedaría personalmente con estas 3 representantes de cada bloque temático: 

"Los bingueros" (1979).

En primer lugar una elección de la mítica  saga de Pajares&Esteso (aunque realmente no fueron tantas películas juntos, si se sumaron también muchas con solo Pajares o solo Esteso), esta es es uno de los mayores éxitos comerciales de Ozores, y la que más ha trascendido y que he visto más veces. Destaca por la mezcla de la sátira de la fiebre del juego en España, el destape, la transición, en resumen comedia sencilla y popular usando humor absurdo y situaciones variopintas, y a echar unas risitas y unos destapes. 

"¡Qué vienen los socialistas!" (1982).

A continuación otra relacionada con el fenómeno de la Transición. En esta película (que se ha emitido en ciclos underground tan importantes como Cine+Doraemons) se refleja el contexto político de la época, en plena Transición española y justo antes de que el PSOE llegara al gobierno. La película combina un parte de crítica y siempre con  humor, sobre las tensiones y los cambios que se estaban produciendo en la sociedad española, ejemplo de cómo Mariano Ozores utilizaba el humor para reflejar aspectos de las realidad social en las diferentes épocas por las que ha trascendido su filmografía.

"¡Cómo está el servicio!" (1968).

Del bloque de películas de la dictadura, con Gracita Morales y J.L. López Vázquez. Casi todas en los años 60 se centran en alguna temática de la España de la época con algo de crítica (con todo lo que significa), en este caso es una sátira social que se burla de las diferencias de clase y las relaciones de poder entre los “patrones” y el servicio doméstico, temas muy presentes en el cine de Ozores. Los dos actores realizarían casi el mismo papel en otras películas con su habitual química-cómica.


Pepe Torres

Durante mis años de plomo, en que el completismo básicamente me obsesionaba y veía todo, de cualquier género o nacionalidad, a cualquier hora del día o de la madrugada, también llevaba registro compulsivo de cada película o serie, y sumaba muescas al revólver de cada actor (López Vázquez ganaba por goleada gracias a su omnipresencia televisiva) y director. Lógicamente dominaban las listas los más prolíficos, delante o detrás de la cámara, y Mariano Ozores asomaba constantemente la patita al podio. Denostado durante años por la crítica y el oficialismo, pero con un olfato certero (casi siempre) para atraer (y, muy importante, satisfacer) al gran público. Director de programación de la incipiente TVE, con sus hermanos como primeras estrellas, su larga carrera como director cinematográfico, casi un centenar de títulos, le sitúa no solo en mi particular podio de entonces, sino en el de uno de los nombres básicos para entender el cine popular nacional. Por elegir tres:

“La hora incógnita” (1963).

La rareza máxima (no es la única, me viene a la cabeza “Veredicto implacable”) y, sin lugar a dudas, su película más ambiciosa y arriesgada. Un fracaso glorioso que le llevó a centrarse casi exclusivamente en las comedias costumbristas (y luego destapistas). Iglesia y bomba atómica, España en estado físicamente puro.

“Yo hice a Roque III” (1980).

Imposible hacer una lista y no incluir, al menos, un título con el tándem Pajares-Esteso. Como muchas otras de ese momento, entre la parodia cinéfila (“Al este del Oeste” o “La llamaban La Madrina”) y el humor algo crudo, sexualizado y políticamente muy incorrecto. Parafraseando a Alaska y los Pegamoides, “Quiero ser un bote de Detergente Pezón y salir anunciado por la televisión”.

“Hoy como ayer” (1966).

Los repartos del cine de Mariano siempre estuvieron superpoblados de lo mejor de la profesión interpretativa, algo especialmente destacable en sus diversas películas episódicas. Puesto a elegir una con Landa (Ozores es landismo), López Vázquez, sus hermanos Peliche y Antonio, Gracita Morales o tantas otras estrellas de su cine, opto por un título que les une estupendamente a todos y a más, muchos más (Gómez Bur, Conchita, su llorada cuñada Elisa Montés, etc.).