miércoles, 18 de mayo de 2022

Hemoglobin (1997)

Nueva reseña, en esta ocasión de la película Hemoglobin. Una vez más a cargo de los hermanos Romero :) 

 Hemoglobin [tv/vd/dvd: Hemoglobina]


Título original: Hemoglobin


Año: (1997, Canadá)


Director: Peter Svatek


Productores: Julie Allan, Pieter Kronenburg


Guionistas: Charles Adair, Dan O’Bannon, Ronald Shusett


Fotografía: Barry Gravelle


Música: Alan Reeves


Intérpretes: Gillian Ferrabee (Eva Van Daam/gemela), Pascal Gruselle (Vermeer), Roy Dupuis (John Strauss), Kristin Lehman (Kathleen Strauss), John Harold Cail (hombre del ferry), Joanna Noyes (Byrde Gordon), Felicia Shulman (Yolanda), Janine Theriault (Alice Gordon), Michelle Brunet (Ramona), David Deveau (Ben), Spencer Evans (Squeakie), Rutger Hauer (Dr. Marlowe), Carmen Ferland (Sra. Shea), Leni Parker (Baby Laura), John Dunn Hill (Hank Gordon), Lisa Bronwyn Moore (Toot),...


Sinopsis: Holanda, 1652, la monarquía prohíbe las relaciones incestuosas, algo muy común entre la nobleza, por los problemas de salud que provocan en la descendencia. Eva Van Daam, aristócrata tremendamente narcisista que mantiene relaciones sexuales con su hermano gemelo, se traslada con los suyos al Nuevo Mundo, a una isla apartada del Este. Allí la decadente familia mantendría negocios clandestinos durante generaciones, hasta que entrado el siglo XX un incendio acabó con el último de su estirpe.

En el presente, la isla la llevan las mujeres, puesto que los hombres se pasan largas temporadas embarcados en alta mar pescando. Sólo dos varones quedan en tierra, un anciano y el doctor. Un día arriban en un ferry una pareja procedente de París, él adolece de una extraña enfermedad en la sangre y busca allí sus orígenes y una explicación a su mal.


Portada edición VHS española.


A finales de los noventa llegaba a los videoclubs españoles Hemoglobin [tv/vd/dvd: Hemoglobina, 1997], película direct-to-video de nacionalidad canadiense -basada levemente (y sin acreditar) en el relato El miedo que acecha (The Lurking Fear, 1923), de H.P. Lovecraft [1]- dirigida por Pater Svatek, realizador mayormente televisivo que, también en el género terrorífico, había perpetrado un par de años antes la tercera entrega de la saga iniciada por Witchboard (juego diabólico) (Witchboard, 1986), de Kevin Tenney. En el guion del film que aquí nos interesa participaron, entre otros, Dan O’Bannon y Ronald Shusett, quienes recuperan esa atmósfera enrarecida, claustrofóbica, portuaria e isleña de la cult movie Muertos y enterrados (Dead & Buried, 1981), escrita por ellos dos y realizada por Gary Sherman.

Roy Dupois, conocido por aquellos años gracias a su papel en la teleserie Nikita (La Femme Nikita, 1997-2001), es John Strauss, el tipo que llega desde Europa para desentrañar los orígenes de su familia y de su enfermedad. La también televisiva Kristin Lehman es Kathleen, la sufrida esposa de aquél. Y Rutger Hauer, lejos de las grandes producciones en las que llegó a intervenir, pero convertido en un icono de la serie B, es el doctor Marlowe, quien otrora gozara de gran prestigio, pero cuya afición a la bebida terminara por condenarle a seguir ejerciendo en esa isla que hace las veces de prisión.

La película contiene esa mirada inquisitiva hacia Europa, como nido de perversión y decadencia, tan propia de los norteamericanos. En esta ocasión hacia la nobleza holandesa, lasciva y narcisista, dada a la endogamia para más inri, provocando una serie de malformaciones congénitas que dan lugar a unos mutantes que, escondidos del exterior, se mueven por los túneles que hay bajo la isla y han desarrollado hábitos necrófagos [2], en la tradición de las leyendas sobre el ghoul. Además, acostumbrados a no trabajar, la noble y los suyos al llegar al Nuevo Mundo se dedicarían a actividades ilegales para enriquecerse allí. Pero esa coartada moral(ista) no recae sólo sobre aquéllos, de la misma manera los habitantes de la isla con una conducta punible -la avariciosa dueña del hotel (que también es funeraria), o la muchacha de modales más casquivanos- están condenadas de antemano a ser alimento para los anómalos Van Damm. Moral(ina) que, junto con la truculencia, emparenta además la cinta con los viejos cómics de terror de la editorial EC.

Pese a la modestia de este título, destinado como se ha dicho más arriba a engrosar en su momento las estanterías de los videoclubs, se agradece la colorista fotografía de Barry Gravelle, que evoca intencionadamente las pinturas de Johannes Vermeer [3], quien no en vano sale representado al comienzo de la cinta (interpretado por Pascal Gruselle), realizando precisamente un retrato de la viciosa aristócrata Eva Van Daam (a la que da vida Gillian Ferrabee). Hay que reconocerle también que las múltiples localizaciones usadas y un reparto, digamos, amplio evitan el estatismo y la pobreza de las que suelen hacer gala este tipo de producciones. De mismo modo, la conclusión, nada optimista para casi ninguno de los protagonistas, la aleja de la autocomplacencia que se fue apoderando del género (y hoy todavía predomina). Achacarle sin embargo lo rudimentario de las caracterizaciones de los mutantes, ya notable en el estreno de la película, pero que no obstante ayuda a dotar a la misma de ese (simpático) aire de serie B.

En el mercado internacional se editaron dos versiones de este film, una íntegra, con el título de Hemoglobin, y una censurada en cuanto a los (pocos) desnudos y que se distribuyó como Breeders. En nuestro país se comercializó el montaje completo.

Alfonso & Miguel Romero


[1] Trasladada a las pantallas previamente por David McCormick y C. Courtney Joyner en 1989 y 1994, respectivamente. La segunda fue una producción de la Full Moon; Charles Band, máximo responsable de la productora, llevaba realizando adaptaciones del genio de Providence tras el éxito que supuso Re-Animator (Re-Animator, 1986), realizada por Stuart Gordon en el seno de la compañía previa de aquél, Empire Pictures.

[2] Este clan, con una progresiva deformidad causada por la endogamia y que se esconde del mundo exterior, recuerda sobremanera al caso de la familia de Alexander “Sawney” Bean, acaecido en Escocia en el siglo XVI y que anteriormente a la presente ya había sido la base de otros filmes de terror como Las colinas tienen ojos (The Hills Have Eyes, 1977), de Wes Craven, o Blood Tracks [tv: Estela de sangre; vd: Huellas de sangre, 1985], de Mats Helge Olsson.

[3] Una de sus obras más celebradas es La joven de la perla, que serviría de inspiración a la película homónima estrenada en 2003. Contó con Peter Webber en la realización y con Scarlett Johansson, Colin Firth, Tom Wilkinson y Cillian Murphy en el reparto.


Contraportada edición VHS española.